Antes de escribir este café lo pensé mucho, habrá a quienes les parezca arriesgado, pero en este mundo, amar es de valientes, y es que sí, es más fácil odiar al otro, es más fácil rechazarlo, es mas sencillo culparlo, amarlo eso sí es difícil, parecería un sacrilegio en esta sociedad convulsionada, decir ama al otro, a ese al desconocido, o tal vez conocido, cuando lo vemos diferente a nosotros.
Por eso es que amar es de valientes y también por eso es que desde pequeños nos enseñan a odiar, por supuesto que es más fácil, separarnos y ponernos un sin fin de etiquetas, para que nos quede claro, que el otro es diferente, y por eso, en todas las instituciones desde la familia hasta el Estado, pasando por la iglesia, nos enseñan a odiar al otro, porque es de otra nación, porque tiene otra religión, porque tiene otras preferencias, y bueno al final hasta porque apoya a un partido político o le gusta más un equipo de fútbol.
Y es que seamos sinceros, es más fácil rechazar que aceptar, es más fácil decir estas equivocado, que tratar de buscar la razón o concederla, y bueno siempre será más fácil culpar al otro de lo que me pasa, llámese padre, jefe o presidente, que hacerme responsable de mi mismo y de mis elecciones.
Si amar es de valientes, por eso este café, te pide que seas valiente, y dejes de odiar, de rechazar, de buscar las diferencias y encuentres las coincidencias, dejes de poner etiquetas, y no permitas que te dividan en partidos y/o ficcionesy busques el amor en tu corazón, porque más allá de las apariencias y de la ilusión que nos han hecho creer de que todos somos diferentes, la verdad es que solo somos diversos rostros de un mismo Dios jugando este juego de reencontrarnos en la fuente y tu ¿te atreves a ser valiente? Con amor SoloDi.
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